Tras el robo sufrido por su mujer y ex intendente de San Lorenzo, Mónica de la Quintana (la amenazaron con un cuchillo en el vientre, mientras caminaba por la calle en Ricardone, en compañía de su hijo, para robarle el calzado y un celular), Traferri sostuvo ayer, en la Legislatura Santafesina, un discurso muy crítico hacia el ministro de Seguridad Raúl Lamberto.
“Que el ministro de Seguridad de la Provincia no está enterado de lo que le está pasando al senador que preside la comisión de seguridad (en alusión a ser blanco de sucesivos hechos delictivos), merece que nos preocupemos, y mucho. Ni siquiera me llamó”, expresó en el recinto.
Para Traferri, el robo al que víctima su esposa es un eslabón más de sucesos delictivos a los que su familia es blanco y que se iniciaron cuando en 2011 tomó la decisión de competir por la banca que ocupa en la actualidad.
Entre tales delitos mencionó el robo a la oficina de su hijo (le extrajeron dos PC), el intento de incendio del departamento de su otro hijo, el incendio a autos de su propiedad, el robo de letreros de campaña, en 2013 y en San Lorenzo, de candidatos de su sector, y ahora el asalto a Mónica de la Quintana.
“Esto no es casualidad, aquí detrás hay una organización mafiosa, un hilo conductor, y un autor ideológico que, sin dudas, son los mismos que tuvieron relación en el caso Zacarías”, expuso, y acotó que detrás de todo ello “hay una gran cobertura política que le ofrece protección”, aunque en este último caso, se guardó de identificar a ese sector.
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