El vicepresidente Amado Boudou tuvo este miércoles algo de protagonismo político desde que fue procesado en la causa Ciccone al encabezar el el acto por el Día de la Independencia en la provincia de Tucumán, ante la laringitis que padece la presidenta Cristina Kirchner y que la obligó a guardar reposo este 9 de julio.
En un teatro cerrado, colmado de militantes, y ante la mirada de varios integrantes del gabinete nacional que lo acompañaron en el escenario, Boudou centró su discurso en la independencia económica y se despachó contra los fondos buitre.
“Para terminar con la deuda hay que terminar con la colonia”, dijo Boudou quien puso el acento en la negociación con los acreedores que no entraron a los canjes de 2005 y 2010..
El vicepresidente afirmó que en Tucumán, hace 198 años, “se declaraba la independencia política y cultural, y ese camino duro y difícil tuvo muchas piedras de afuera y adentro porque el colonionalismo no sólo tiene forma política sino que tiene formas económicas que subsisten en el mundo moderno”.
En este sentido, recordó que en ahora los ministros “van a Washington a plantear las necesidades del país", cuando antes iban "a sacarse fotos en la alfombra roja”. “Hoy tenemos ministros que van a plantear las necesidades del país, a decir tenemos voluntad de pago, pero no a expensas del pueblo”, remarcó.
El discurso del vicepresidente fue corto –duró apenas diez minutos– y no fue transmitido por cadena nacional.
