Cadena perpetua para el ex dictador Bignone

El Tribunal Oral Federal Nº1 de San Martín condenó ayer a prisión perpetua al ex dictador Reynaldo Bignone y al ex comandante de Institutos Militares Santiago Riveros por crímenes de lesa humanidad cometidos en Campo de Mayo en perjuicio de 23 víctimas, entre ellas siete embarazadas que dieron a luz en maternidades clandestinas.

El tribunal condenó además al matrimonio compuesto por Carlos del Señor Garzón y María Morillo por la apropiación de María Catalina Sánchez Ovando, quien recuperó su identidad en 2008, a 15 y 12 años de prisión, respectivamente.

También se les dictó prisión perpetua a los represores Luis Sadi Pepa, Eduardo Corrado y Carlos Macedra. En cambio, a José Somoza se lo condenó a 25 años de prisión; a Julio San Román y Miguel Castagno Monge, 20 años, y a Eugenio Guañabens Perelló, 16 años.

A Osvaldo García, ex director de la Escuela de Infantería y responsable de los delitos cometidos en el Area 450, se le suspendió el proceso por razones de salud.

"Es bueno que les den una condena alta", afirmó la querellante y miembro de Abuelas Alba Lanzilotto, y agregó que "estos juicios son posibles por la lucha de 30 años que lleva este pueblo y un gobierno que empuja a tomar conciencia".

La nieta recuperada María Catalina Ovando de Sánchez señaló que "no celebro que ellos (por sus apropiadores) vayan a la cárcel, pero celebro que no haya impunidad y que la Justicia los haya encontrado culpables", y agregó: "Agradezco a mis abuelos que me buscaron toda la vida; la sociedad tiene que entender que la apropiación no es un gesto de amor".

En tanto, Manuel Gonçalves, quien recuperó su identidad en el año 1997 y acompaña a otros nietos y abuelas en los juicios por apropiación, dijo que "cuando yo recuperé mi identidad reinaba la impunidad en Argentina, tuve la suerte de vivir la caída de las leyes de impunidad sabiendo quién era realmente", y agregó que "tengo claro la diferencia entre esa Argentina y la de hoy. Lo que estamos haciendo es juzgar desde la democracia a esa dictadura genocida", señaló.

En el hospital militar de Campo de Mayo funcionó una maternidad clandestina en donde las prisioneras parturientas eran alojadas para dar a luz, tras lo cual eran separadas de sus hijos, que luego eran entregados a familias conocidas de los militares. Esos hechos fueron conocidos a partir de las declaraciones de sobrevivientes y de enfermeras que atendieron a las víctimas en el área restringida.

“El Sindicato de Aceiteros no defiende ni oculta a un delincuente”

Así se refirió Pablo Reguera, Secretario General del SOEA, sobre la acusación que pesa sobre un trabajador que es investigado por presunto abuso sexual. “No es delegado del sindicato o de Reguera”, dijo el sindicalista
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Apenas se conoció la noticia sobre el presunto abusador de zona norte, muchos remarcaron que el acusado es un trabajador aceitero. Incluso llegaron a realizar escraches (mediante volantes en la vía pública) recalcando esa condición laboral, por encima del delito por el cual se lo investiga.

“Queríamos aclarar la situación porque el acusado es delegado de Buyatti, pero no tiene nada que ver con los aceiteros. Nunca lo nombramos y mucho menos lo apoyamos o protegemos. Fue elegido por los compañeros de turno”, explicó Pablo Reguera, Secretario General del Sindicato de Obreros y Aceiteros (SOEA) de San Lorenzo.

“La Justicia debe investigar a fondo y llegar a la verdad”, señaló Reguera y sintetizó: “El Sindicato de Aceiteros no apoya, ni defiende, ni oculta a un delincuente. Y marcamos nuestro repudio hacia el delito del que se lo acusa”.

La reunión entre Reguera y la familia de las nenas que habrían sido abusadas fue promovida por Marcelo Remondino, quien en las últimas horas mantuvo su asesoramiento para con las familias de las niñas. “Le dijimos a los familiares que era bueno reunirse con Reguera, puesto que se comentaban muchas cosas que no eran ciertas”, señaló Remondino y sumó: “Acá lo importante es que surja la verdad y que se proteja a las niñas”.

“La familia entendió perfectamente la situación. Había una confusión, a partir de cosas que se dijeron, pero ahora está todo claro”, dijo Reguera tras la reunión, y sumó: “El sindicato no puede tomar hoy medidas sobre la persona acusada, pero sí acompañamos el proceso que lleva adelante la Justicia. Los que pueden correr a este hombre de su lugar de delegado son sus propios compañeros”.

Indagatoria. Según confirmó Remondino, se esperaba que durante el día de hoy el acusado de abuso, Marcelo S. de 43 años, sea convocado a Tribunales para prestar una declaración indagatoria.

El nuevo Papa es Jorge Bergoglio

Sorpresivamente, el cardenal argentino se convirtió en el máximo pontífice de la Iglesia Católica con el nombre de Francisco I. Es el primer latinoamericano y jesuita de la historia en alcanzar ese cargo. Tras dos fumatas negras, los 115 cardenales reunidos en la Capilla Sixtina llegaron a un consenso para elegir al sucesor de Benedicto XVI. Una multitud se reunió en la plaza San Pedro

Histórico. Habemus Papam y es argentino. En forma sorpresiva, y cuando los nombres que estaban en boca de todos eran los de Angelo Scola, Odilo Sherer y Peter Tucson, el Vaticano comunicó que el nuevo papa, y sucesor de Benedicto XVI, es el cardenal argentino Jorge Bergoglio. El argentino se convirtió, para sorpresa de muchos, en el nuevo Papa de la Iglesia católica, luego de cinco votaciones realizadas desde este martes en el Capilla Sixtina. Llevará el nombre de Francisco I.

Con una fumata blanca, luego de dos negras y en la quinta votación de los 115 cardenales reunidos en la Capilla Sixtina, se anunció que existía consenso en la designación del máximo pontífice.

Pero todavía restaba conocer el nombre de la máxima autoridad de la Iglesia Católica. Fue sobre las 16.12 (hora argentina) que el cardenal francés Jean Lois Tauran hizo el anuncio histórico ante la multitud que se congregó en el corazón de la histórica plaza de San Pedro. Bergoglio, que eligió llamarse Francisco I, es el Papa número 266, el primero de origen latinoamericano y el primero de nacionalidad argentina.

"Anuntio vobis gaudium, habemus Papam", dijo Tauran y luego Bergoglio, vestido por primera vez con la vestimenta papal, hizo su primera aparición en el balcón.

 

"Me vinieron a buscar al fin del mundo, agradezco por recibirme de esta forma, gracias. Primero de todo quiero rezar una oración por nuestro querido Benedicto XVI, nuestro obispo emérito. Vamos a orar juntos por él", fueron las primeras palabras de Francisco I, quien optó por utilizar el italiano para dirigirse a los fieles.

Tras rezar el Padrenuestro junto a los manifestantes que se acercaron a la histórica Plaza de San Pedro, el flamante Papa dijo: "Recen por mí y hasta pronto, mañana iré a rezarle a la Virgen para que proteja a toda Roma, buenas noches y que descansen".

 

La elección del Papa

En el primer día de deliberaciones del cónclave papal, los 115 cardenales no habían conseguido alcanzar los dos tercios de votos necesarios para designar al reemplazante de Benedicto XVI. Finalmente, y tras el quinto intento (el cuarto de hoy), la fumata blanca demostró que al menos 77 cardenales llegaron a un acuerdo.

 

Bergoglio cumplió con el protocolo, pasó a la “Sala de las Lágrimas”, donde se vistió con sotana blanca y zapatos rojos. Luego salió al balcón de la basílica para saludar a los miles de fieles presentes en la Plaza de San Pedro e impartió la bendición Urbi et Orbi.

 

La rapidez en el escrutinio mantiene la tónica de los últimos decenios, en los que no se han superado las once votaciones.

Pío XII fue elegido con tres votaciones y en apenas 24 horas; Juan Pablo I, con cuatro; Benedicto XVI con cuatro, Pablo VI, con cinco; Juan Pablo II, con ocho, y Juan XXIII, con once.

Tras dos fumatas negras, los 115 cardenales reunidos en el Vaticano eligieron en sólo dos días de deliberaciones al sucesor de Benedicto XVI. Una multitud se hizo presente en la plaza de San Pedro y esperó desde temprano el resultado más la primera aparición del nuevo sumo pontífice.

Francisco I

Francisco I fue el nombre elegido por el mismo Bergoglio. "¿Quo nomine vis vocari?" ("¿Con que nombre quieres ser llamado?"). El nuevo pontífice respondió "vocabor Franciscus" ("Me llamaré Francisco").

La pregunta fue realizada por el cardenal Giovanni Battista Re a Jorge Bergoglio, en nombre todos los electores.