
La idea de festejar con un torta no es privativa del casamiento pero, a menos que se trate de una fiesta infantil, los pasteles de estas celebraciones superan por lejos a los de otros eventos.
Estas uniones se caracterizan por los bizcochuelos barrocos, coronados por una pareja feliz y con la promesa de "para toda la vida"
Sin embargo, las delicias conyugales no siempre se sostienen, es más, a veces ni siquiera llegan.
Alentados quizás por estas realidades, algunas parejas decidieron "celebrar" sus divorcios también con una torta alusiva, pero nada amorosa.