Un temporal de lluvia y granizo, con caída de piedras del tamaño de pelotas de ping pong, se abatió anoche sobre la ciudad de Reconquista, a 360 kilómetros al norte de la capital provincial, sin que se produjeran víctimas pero sí daños materiales.
La tormenta comenzó cerca de las 22.30, primero se produjo la caída de granizo que duró unos 5 minutos, suficientes como para dañar numerosos automóviles que se encontraban estacionados en la calle, toldos y carteles de negocios, además de techos de vivienda.
“Fue impresionante, nunca vi algo parecido como esto, las chapas parecían que iban a ceder de tan fuerte que eran golpeadas por esas tremendas piedras”, contó un vecino de Reconquista, Adrián Pereyra.
El caudal de lluvia no fue abundante, solo 8 milímetros, pero el granizo afectó a Reconquista, Avellaneda, Paraje Las Garcitas, zona norte del distrito Las Garzas, en Lanteri y zona rural entre Malabrigo y Los Laureles.
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