Desde ayer a la tarde cerca de 15 presos mantenían una manifestación por mejores condiciones de reclusión. Sus familiares los apoyan desde afuera con una sentada y denunciaron maltratos.
Desde martes a la tarde, cerca de 15 presos se encontraban amotinados en la comisaría 1ª. Sus familiares, que lo apoyan con una sentada en la vereda de la seccional, denunciaron todo tipo de maltrato de parte de los policías hacia los internos e incluso hacia sus visitas.
“Mi hijo hizo algo, que lo pague, está bien pero que no se la agarren con él”, se quejó la mamá de uno de los internos.
Otra mujer, familiar también de uno de los presos, contó que los policías suelen despertar a los reclusos en medio de la noche y golpearlos; señaló además que este martes, cuando visitó a su ser querido, lo encontró muy herido. “Tuve que acomodarle el hombro”, apuntó y denunció maltratos hacia ella misma. Precisó que antes de ingresar a la sala de visitas, la obligaron a desnudarse y ponerse en “cuatro patas”.
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