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COMUNA DE TIMBÚES

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viernes, 28 de noviembre de 2014

Pedro “Pili” Rodríguez resiste en un sanatorio para evitar ir a una celda.

El ex diputado provincial y funcionario y concejal sanlorencino, sentenciado a cárcel por cometer delitos de lesa humanidad, continúa internado en un nosocomio de Rosario.

Pedro “Pili” Rodríguez resiste en un sanatorio para evitar ir a una celda

Debido a una afección cardíaca, Pedro Rodríguez continúa internado en el sanatorio I.C.R. de Rosario, donde se repone satisfactoriamente, según indicaron algunos allegados.

Hasta tanto no tenga el alta médica estará impedido de trasladarse hasta el penal de Marcos Paz, lugar designado por la Justicia para que purgue la pena determinada por el Tribunal Federal de Rosario en la denominada causa “Manuel Casado” -fue condenado a 8 años y medio de prisión-, donde lo hallaron culpable de cometer delitos de lesa humanidad, al igual que a los ex militares Horacio Maderna y Rubén Cervera quienes ya cumplen sus sentencias.

Rodríguez ocupó durante la primera parte del último gobierno de facto sanlorencino un estratégico cargo en el gabinete y fue identificado por Casado de someterlo a torturas y tormentos.

Recuperada la democracia, Rodríguez volvió a involucrarse con la vida partidaria y regresó al peronismo, del que fue militante y dirigente en los convulsionados años 70.

Con el triunfo de Armando Traferri (actual senador departamental) en 1991, tuvo la posibilidad de regresar a un cargo de gabinete y ocupar la Secretaría de Gobierno. De esta manera, el actual legislador reconoció el apoyo logístico del entonces compañero de ruta para vencer en esas elecciones al entonces intendente Rubén Tévez, del que, a su vez, Traferri fue su secretario de Obras Públicas.

Fue funcionario durante varios años y fiel a su estilo hizo y deshizo a su antojo la política que el municipio llevó adelante en aquella primera etapa del traferrismo.

Luego tuvo la ocasión de convertirse en diputado provincial integrando su apoyo al ex gobernador Jorge Obeid.

Vaya las paradojas de la política, pues precisamente Obeid fue un preso político de la dictadura militar y, Rodríguez, todo lo contrario, de acuerdo a lo que resolvió la Justicia. ¿Y Traferri nunca se enteró quien tuvo en su gobierno? Definitivamente parece que no, quedando excluido por omisión de toda sospecha, pues entonces  (y quizás aún) no se estilaba “indagar” el currículum de las personas, incluyendo su pasado político reciente.

Rodríguez siguió “vivo” muchos años en la política sanlorencina -fue concejal-, no solo partidaria, sino también gremial. Pero eso será material para alguna próxima crónica.

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